El ser humano, no hace más que arrasar con todo lo que se pone en su camino.
Se supone, que somos una especie con una inteligencia superdotada, ¿no deberíamos aprovecharla para realizar cosas buenas?, ¿no deberíamos mirar por el porvenir de las futuras generaciones?. Lejos de ello, no paramos de sobreexplotar los recursos naturales, arrasando bosques, contaminando nuestras aguas, sobreexplotando nuestros suelos, destrozando ecosistemas y perjudicando gravemente a la biodiversidad... la huella del hombre en la Tierra es clara, y, es sinónimo de destrucción.
Pocas personas se preocupan por el medio que las rodea, por el medio que les da comida, bebida y un lugar en el que vivir. Talamos bosques sin mesura para la industria maderera, explotamos tierras para la obtención de combustibles fósiles y de otros minerales, arrasamos mares, océanos y ríos para comernos a sus habitantes, acabamos con cientos de hábitats para obtener "beneficios", para construir casas, urbanizaciones, hoteles... y aquí, es donde pregunto yo...¿ de verdad somos inteligentes?, ¿ no nos damos cuenta de que todas las actividades anteriormente mencionadas y otras muchas generan unos costes ocultos difícilmente reparables?.
Cientos de catástrofes naturales han sido provocadas por el hombre, el derrame Exxon Valdez (Alaska), desastre de Kingston (Tennessee), Desastre de Bhopal (India), el hundimiento del prestige... al parecer, es cierto el dicho de que el ser humano siempre tropieza con la misma piedra.
La última nueva, es, lo que el gobierno pretende autorizar o mejor dicho, ya ha autorizado. Al parecer, tiene pensado dar su consentimiento para arrasar Galicia, sabiendo ya las consecuencias de la macrominería. Galicia abre sus puertas a las multinacionales extranjeras para convertirse en una gran mina a cielo abierto, con ello, se generarán millones de euros debido a la masiva extracción de oro pero...las consecuencias medioambientales serán extremadamente trágicas. Se erosionarán miles de hectáreas de suelos que nunca recuperarán su valor natural, se destruirán ecosistemas, se contribuirá a la destrucción de especies y así pues, a la pérdida de biodiversidad, se conducirá a la desertificación, se contaminarán aguas, suelos y aire. La devastación y la pobreza medioambiental inundará Galicia.
Estos megaproyectos, relacionados con la actividad minera, se asentarán próximos a reservas naturales y ríos que obviamente quedarán gravemente afectados, tardando en recuperar sus condiciones naturales cientos o miles de años, o tal vez... no recuperándolas jamás, serán destinados a la destrucción, por el beneficio de unos cuantos inconscientes que no se dan cuenta de que en realidad los beneficios son nulos comparados con los gastos ocultos que generará en el entorno.
En la mina de Corcoesto, se extraerán 34 toneladas de oro, para ello, se volarán con explosivos unas 392 hectáreas, el equivalente a unos 530 campos de fútbol, utilizándose durante el proceso, 4300 toneladas de cianuro, que generarán 8.400 toneladas de arsénico y dejarán un total de 17.000.000 de toneladas de deshechos contaminantes.
El arsénico, es veneno puro para la Tierra, esta sustancia será canalizada por arroyos, acuíferos, aguas superficiales y subterráneas que desembocarán en mares, ríos, lagos y océanos, y llegando también a la atmósfera, provocando la muerte de millones de especies que en ellos habitan, haciéndolos no aptos para la ingesta o utilización humana y provocando diversas patologías en nuestra propia especie y en todas las demás.
La Consejería de Medio Ambiente, ha dado el visto bueno a este proyecto y probablemente a otros seis de semejante índole, todo ello, sin que ni siquiera las empresas que van a devastar estas tierras hayan realizado un estudio pormenorizado del impacto ambiental que supondrá su actividad que, según estudios científicos, supondrán una verdadera bomba ambiental. Entre otras consecuencias, se aumentará el porcentaje de casos de cáncer hasta en un 800%, se producirán malformaciones genéticas, infecciones broncopulmonares, envenenamientos... y todo esto, con la aprobación de nuestro propio gobierno, el cual, una vez más, muestra su pasividad e incompetencia en cuanto a los temas ambientales.
Aún estamos a tiempo de parar la megaminería contaminante, aún, podemos salvar Galicia.
Puedes dar tu apoyo y firmar para parar este enorme atentado contra la Tierra, nuestro planeta, al cual, tenemos la obligación de proteger. A continuación, pongo el link, en el cual podeis firmar:
http://www.change.org/es/peticiones/que-no-arrasen-galicia-paremos-la-megaminer%C3%ADa-contaminante?utm_campaign=twitter_link_action_box&utm_medium=twitter&utm_source=share_petition
En el siguiente vídeo podéis ver un resumen de esta trágica realidad.
Soraya R. Oronoz
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