jueves, 27 de noviembre de 2014

La mirada del toro que piensa

Noble mirada de triste alma,
susurra en silencio tu voz cansada.

Tierra árida y lágrimas entrecortadas,
recuerdo de una mañana dorada.

Verde como la hierba, azul como el cielo,
tus recuerdos vuelan,
tu vida se cierra.

Elevado entre aplausos, boquiabierto quedas

¿por qué?, ¿por qué?

Ya no esperas.


Un día sentí y un día amé,
amé el sol de la mañana de invierno,
entendí el frescor de la hierba,
probé la libertad que hoy me arrebatan.
saboreé el color de las flores.




















Sufrí el desaliento de haberlo tenido todo y perderlo en un solo momento.

Las flores ya no están,
el sol se ha nublado,
la hierba es sólo un recuerdo, 
de un reciente pasado.



Soraya R. Oronoz

4 comentarios:

  1. muy buena poesía, me gusta mucho cuando la gente usa palabras para crar versos y así transmitir con un mayor grado de sentimiento, creo que el mensaje así cala más ;)

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    2. Me alegro de que te guste Jair. Así mismo, me gusta saber que sigues paseando por este blog de vez en cuando, ya sabes que es un proyecto que surgió de nuestras mentes. Siempre recordaré el día en que junto a ti desperté y pude ver la realidad

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  2. Oda preciosa al toro, pero a la vez triste, porque habla de su triste fin, fin que debe llegar a su hora, no cuando una persona decida que la vida de ese ser vivo debe terminar.

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