jueves, 25 de julio de 2013

Regeneración, avance para unos, tortura para otros

La biología del desarrollo comienza a entender  la clave que posibilita la regeneración de órganos en algunos animales.

Para muchos animales, regenerar sus propios órganos no supone ningún problema, ya que es un proceso que llevan a cabo de manera totalmente natural, entre las criaturas que tienen esta capacidad de regeneración encontramos las planarias, los gusanos planos y en menor medida las lagartijas, peces y ajolotes mexicanos que pueden incluso regenerar órganos internos como el corazón


Tras años de investigación y observación de animales con capacidades regeneradoras para su organismo, el biólogo del desarrollo Yoshihiko Umesono, del Instituto Riken en Kobe, Japón y sus compañeros del Instituto Max Planck de Biología Molecular y Celular, en Dresde, y las universidades de Illinois y San Francisco presentan en tres trabajos en Nature, unas investigaciones que penetran en la lógica más profunda de la regeneración, en sus claves genéticas y celulares. Todo ello en las planarias.

Esta capacidad está siendo estudiada para poder aplicarla en un futuro o un presente no lejano para la reparación de órganos en humanos para poder moldear a nuestro gusto y conveniencia los procesos de regeneración natural de los mismos.

Algunas de estas especies de gusanos muestran una capacidad de regeneración completa, otras solo son capaces de reparar pequeñas partes de su organismo. Los científicos han encontrado los componentes de las primeras planarias (genes, moléculas o células) que pueden conferir a las segundas planarias la capacidad de regenerar la cabeza, lo cual, supone un gran hito en la investigación que podrá ser aplicado a la medicina humana siempre con unas limitaciones y tras hacer muchos más estudios que garanticen su seguridad, no quiero decir que se vaya a poder regenerar una cabeza humana, ovbiamente, por el momento, por suerte, la tecnología no ha llegado a esos extremos, pero sí se puedrá aplicar para restaurar diversos tejidos.

Cómo no... una vez más el ser humano utiliza a otra especie para tratar de mejorar sus propias condiciones. Tal vez, no os hayáis parado a pensar en lo que esto conlleva, para hacer este tipo de descubrimientos, millones de gusanos y otras criaturas habrán estado malviviendo en condiciones indignas en un laboratorio en provetas, jaulas... me imagino a los científicos cortando cabezas esperando que se regeneren con un resultado positivo en algunos casos pero negativos en otros, arrancando las vidas a sus propietarios legítimos, un laboratorio de ejecuciones al minuto.

Creerme, los gusanos no son las criaturas que más me apasionan del mundo, pero son seres vivos y por el simple echo de vivir, tienen derechos que nosotros estamos vulnerando, una vez más en nombre de la ciencia.




Lo preocupante es, que millones de científicos y de futuros estudiantes del mundo de las ciencias biológicas, veterinaria, medicina... consideran que los invertebrados y otros animales como ratitas, ratones... están en este mundo para que el hombre pueda investigar con ellos. Esto, sinceramente, me causa repulsa, ¿cómo un estudiante o alguien que se dedica a la comprensión de la vida y de su desarrollo puede considerar inferiores otras especies por el simple echo de que no sean idénticas a la suya?

Cada vez que se lanza a a la luz los resultados de algún estudio de este tipo, me alegro por los avances, claro que sí, pero me preocupo por los medios que se usan para obtener los fines injustificados que conllevan la tortura, mutilación y asesinato de millones de seres que merecen una  vida  como tú y como yo.

Soraya R. Oronoz

2 comentarios:

  1. Creo que si estos estudios siguen avanzando, se pasará de gusanos a otros animales mas grandes, a fin de poder experimentar y realizar miles de pruebas antes de valorar hacer esto con un humano, miles de vidas sufriendo y siendo asesinadas!

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    1. Hola Jair, estos estudios ya se están realizando en roedores, por desgracia...

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